La inspiración me llega cuando peor o mejor estoy. Al nublarse todo, me refugio en mi mente y empiezo a divagar a lo atípico en mí. De pequeñita, pensaba que en mi armario había un principe que vivía en un castillo lleno de soles. En el parque, jugaba a los médicos( "muy sanamente"), me divertía con mi bicicleta dando vueltas a la pista y recorriendo las calles del pueblo. Un dia, fuí a la peluquería y le dije a todas mis amigas me había cortado el pelo "largo", y todas alucinaron. Era algo tan bonito y asombros.. ¡Es que eso no pasa todos los días!¡cortarse el pelo "largo"!. El salir a la calle para mí era algo fantástico, me encantaba, quería ir a todos sitios, explorar, y conocer muchísima gente.
Pasando el tiempo, y en consecuencia cambiando yo, la ansiedad me come por terminar lo inacabado, las gestiones, los compromisos, el trabajo, el culturizarse, el enriquecerse....
En que estación de este viaje quedó mi gusto por lo sencillo, mi conformismo con lo simple, mi fantasía. La agorafobia se empapa de mi ser en ocasiones, pero pongo de mi parte.
viernes, 26 de junio de 2009
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Debes seguir poniendo todo de tu parte Conchi, todo.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Conchi, acabas de hacer una descripción muy exacta de lo que es una personalidad creadora. Más personas así deberíamos tener.
ResponderEliminarCreo que para crear hay que andar por los extremos, y en ciertos casos lo negativo facilita las posibilidades de expresión.
Un beso amiga!
Cuando vamos creciendo las cosas simples de la vida ya no nos asombran tanto, y la rutina a veces va ganando terreno, la felicidad muchas veces radica en cosas aparentemente superfluas, sin buscar en lo que "debe ser" una sonrisa...
ResponderEliminarBeso Conchi :)!
ay yo deliraba q adentro del ropero vivían seres tambien !
ResponderEliminares re lindo lo de "me corte el pelo largo"! me encanto esa frase!
Un beso :)